Page 7 - Iberferr 228
P. 7

OPINIÓN
‘Progresismo’ y ‘regresismo’ Lo que nos diferencia
Santiago P. Fernández, director de Iberferr
Si la medida de lo civilizado vie- ne dada por cuánto nos separa de los animales, tenemos que con- cluir que medio mundo está en regresión. No nos equivoquemos. Admiramos a algunos cuadrúpe- dos cuando nos sorprenden con acciones que se acercan a lo que hacen las personas normales. Un buen perro viene a ser aquel que hace cosas casi humanas cuando los humanos que le tutelan caen en ciertas animaladas. Regresión, en psicología y en otros ámbitos, es una vuelta atrás, un retroceso a etapas pre- téritas. O sea, que los humanos estamos de regreso cada día. Progresismo y regresismo tam- bién circulan por ese mismo ca- mino de ida y vuelta en el mundo
de la política. ¿Les suena? Como quiera que la política es lo contra- rio de lo rectilíneo, el progresismo en política representa a menu- do un acercarse más a lo animal que a lo humano. Pura regresión, una vuelta atrás por otros atajos. Deconstruir (destruir) rara vez es sinónimo de progresar. Tam- poco lo es lavar ciertas banderas con jabón del lagarto. La tela no lo aguanta y acaba rajándose. A veces, un ideario que se dice de progreso no es más que uno de regreso. Un volver a empezar, un pretérito que ni siquiera asumi- ría la ferretería de barrio empe- ñada en seguir siendo lo que era. Y en esas estamos. Hasta la coro- nilla del progresismo envuelto en un papel mil veces reciclado.






























































































   5   6   7   8   9